Necesidades Básicas Humanas

Las 14 necesidades de Virginia Henderson es una teoría o modelo que define el enfoque de la práctica de la enfermería.Este modelo fue definido por Virginia Avenel Henderson...
Escrito por: José María Vázquez Chozas
junio 17, 2022
Necesidades básicas de Virginia Henderson

Virginia Henderson, reconocida como una de las figuras más influyentes en la historia de la enfermería, dejó un legado perdurable que ha moldeado la práctica y la teoría enfermera.

Su enfoque humanista y su énfasis en la atención integral han dejado una profunda huella en la forma en que los profesionales de la salud abordan la atención al paciente en la enfermería moderna y en la atención centrada en el individuo.

En este artículo, vamos a conocer sobre la biografía y las contribuciones de Virginia Henderson, examinando su visión única de la enfermería y su papel fundamental.

Hemos preparado otro artículo, donde explicamos al detalle cada una de las 14 Necesidades Básicas Humanas de Virginia Henderson, fundamentales para comprender la experiencia del paciente y que serán analizadas detalladamente, sirviendo como vínculo esencial con otro artículo que profundiza en cada una de ellas.

14 necesidades básicas de Virginia Henderson

1. Necesidad de respirar normalmente

La necesidad de respirar normalmente es esencial para el funcionamiento del cuerpo humano, garantizando un eficiente intercambio de gases y el equilibrio en la oxigenación de los tejidos, lo cual es crucial para la supervivencia.

Este proceso fisiológico implica la inhalación y exhalación de aire, permitiendo la captación de oxígeno y la eliminación de dióxido de carbono. Se clasifica como una de las necesidades vitales fundamentales del ser humano.

Diversos factores, como enfermedades pulmonares crónicas, alergias, infecciones respiratorias, tabaquismo y contaminación del aire, pueden desencadenar trastornos respiratorios, subrayando la importancia de abordar esta necesidad básica.

La pandemia de la COVID-19 ha intensificado la conciencia sobre la relevancia de la salud respiratoria y la prevención de infecciones respiratorias. Los profesionales de enfermería desempeñan un papel crucial en asegurar la salud respiratoria de los pacientes.

En este contexto, los enfermeros pueden llevar a cabo evaluaciones de la función pulmonar, proporcionar oxígeno suplementario y administrar medicamentos para abordar trastornos respiratorios. Además, la educación del paciente sobre ejercicios de respiración y técnicas de relajación se ha vuelto fundamental para mejorar la calidad de la respiración.

La enfermería, siendo consciente de las estadísticas relacionadas con enfermedades respiratorias, desempeña un papel destacado en garantizar que los pacientes respiren adecuadamente y en el tratamiento efectivo de cualquier trastorno respiratorio. Este enfoque proactivo contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida de los pacientes, subrayando la importancia de satisfacer esta necesidad básica para el bienestar general.

Afecciones derivadas de no respirar adecuadamente

  • Hipoxia: Es una disminución de la cantidad de oxígeno en los tejidos del cuerpo, lo que puede causar daño celular y afectar el funcionamiento de los órganos.
  • Cianosis: Es una coloración azulada o violácea de la piel y las mucosas debido a la falta de oxígeno en la sangre.
  • Apnea del sueño: Es un trastorno en el que la persona deja de respirar durante breves períodos de tiempo mientras duerme, lo que puede provocar somnolencia diurna, hipertensión arterial y otros problemas de salud.
  • Asma: Es una enfermedad crónica que causa inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias, lo que dificulta la respiración y puede causar sibilancias, tos y opresión en el pecho.
  • EPOC: Es una enfermedad pulmonar crónica que se caracteriza por una limitación del flujo de aire hacia los pulmones, lo que puede provocar tos crónica, dificultad para respirar y fatiga.
  • Neumonía: Es una inflamación de los pulmones que puede ser causada por bacterias, virus u hongos, y que puede provocar fiebre, tos, dolor en el pecho y dificultad para respirar.
  • Embolia pulmonar: Es una obstrucción de una arteria pulmonar por un coágulo de sangre, lo que puede provocar dolor en el pecho, dificultad para respirar y, en casos graves, colapso circulatorio.

Cuidados enfermeros para la necesidad de respirar normalmente

  • Observación de la frecuencia respiratoria: La enfermera debe evaluar la frecuencia respiratoria del paciente y documentar cualquier anormalidad. Si la frecuencia respiratoria es anormal, se deben tomar medidas para ayudar al paciente a respirar normalmente.
  • Oxigenoterapia: La administración de oxígeno puede ser necesaria para ayudar al paciente a respirar normalmente. La enfermera debe evaluar la necesidad de oxigenoterapia y administrarla según sea necesario.
  • Terapia respiratoria: La terapia respiratoria puede incluir técnicas de respiración profunda, tos, espirometría y otros tratamientos destinados a mejorar la función pulmonar y ayudar al paciente a respirar normalmente.
  • Posicionamiento adecuado: El posicionamiento adecuado del paciente puede ayudar a mejorar la respiración. La enfermera debe ayudar al paciente a encontrar una posición cómoda que permita una respiración adecuada.
  • Administración de medicamentos: En caso de enfermedades respiratorias como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), los enfermeros pueden administrar medicamentos para aliviar los síntomas y mejorar la capacidad respiratoria del paciente.
  • Evaluación y tratamiento de la ansiedad: La ansiedad puede interferir con la capacidad del paciente para respirar normalmente. La enfermera debe evaluar la ansiedad del paciente y proporcionar intervenciones para reducir la ansiedad, como técnicas de relajación y apoyo emocional.
  • Educación sobre el cuidado pulmonar: La enfermera debe proporcionar educación al paciente y la familia sobre el cuidado pulmonar, incluyendo la importancia de evitar el tabaquismo, la necesidad de ejercicio regular y otros hábitos de estilo de vida saludables para mantener la función pulmonar normal.
  • Fisioterapia respiratoria: En algunos casos, se puede realizar fisioterapia respiratoria para ayudar a los pacientes a mejorar la función pulmonar. Esto puede incluir ejercicios de respiración y técnicas de limpieza bronquial.

Datos y estadísticas relevantes

  • La frecuencia respiratoria normal en adultos en reposo oscila entre 12 y 20 respiraciones por minuto.
  • La frecuencia cardíaca normal en adultos en reposo oscila entre 60 y 100 latidos por minuto.
  • Los niveles normales de oxígeno en la sangre varían entre 95% y 100%.
  • La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una de las principales causas de morbimortalidad en todo el mundo, y se estima que afecta a más de 200 millones de personas.
  • Según la OMS en 2016, las enfermedades respiratorias crónicas fueron responsables de aproximadamente 3 millones de muertes en todo el mundo.
  • Los problemas respiratorios son una de las principales causas de muerte en pacientes con COVID-19.
  • La COVID-19 ha afectado a millones de personas en todo el mundo desde su inicio en 2020.
  • En 2019, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) afectó a más de 251 millones de personas en todo el mundo.
  • La EPOC causó alrededor de 3,2 millones de muertes en 2019, según la Organización Mundial de la Salud.
  • Los pacientes con EPOC que recibieron educación y entrenamiento en técnicas de respiración tuvieron menos ingresos hospitalarios y menos visitas a la sala de emergencias relacionadas con su afección respiratoria.
  • Estudio del Journal of Emergency Nursing: pacientes con EPOC que recibieron educación en técnicas de respiración tuvieron menos ingresos hospitalarios y visitas a emergencias por afecciones respiratorias, con mejora en calidad de vida y capacidad de ejercicio.
  • Estudio del Journal of Thoracic Disease: la ventilación no invasiva en pacientes con insuficiencia respiratoria aguda redujo la mortalidad y la necesidad de intubación endotraqueal, con mejoría en la función pulmonar y la frecuencia respiratoria.
necesidades basicas de virginia henderson

2. Necesidad de comer y beber adecuadamente

La necesidad de comer y beber adecuadamente abarca la capacidad de ingerir alimentos y líquidos de forma apropiada, incluyendo la masticación y deglución adecuadas, así como la absorción de nutrientes esenciales para proporcionar la energía necesaria en las actividades diarias.

Esta necesidad también se vincula con la sensación de hambre y sed, y la capacidad de satisfacer estas necesidades para mantener una vida saludable y satisfactoria.

La alimentación y la hidratación son fundamentales para el funcionamiento óptimo del cuerpo, suministrando los nutrientes necesarios para las actividades diarias. Una dieta equilibrada y variada, que incluya diversos alimentos, es esencial para prevenir enfermedades y mantener una salud óptima.

La falta de una alimentación adecuada puede resultar en deficiencias nutricionales y problemas de salud, como anemia, debilidad, fatiga, enfermedades cardiovasculares, diabetes y obesidad.

La deshidratación, por otro lado, puede afectar negativamente la capacidad cognitiva y causar fatiga.

Además de su función biológica, la necesidad de comer y beber también tiene aspectos sociales y culturales significativos. La comida y la bebida no solo son fundamentales desde el punto de vista biológico, sino que también desempeñan un papel crucial en la construcción de la identidad y la cultura de una persona.

Compartir una comida con amigos y familiares, por ejemplo, va más allá de la nutrición y se convierte en una fuente de alegría y bienestar emocional, resaltando la importancia de abordar esta necesidad de manera integral para el bienestar general.

Afecciones derivadas de no comer y beber adecuadamente

  • Desnutrición: puede ocurrir cuando el cuerpo no recibe suficientes nutrientes, lo que puede conducir a una serie de complicaciones de salud, como una mayor susceptibilidad a las infecciones y enfermedades, una curación más lenta de las heridas, debilidad muscular y fatiga, entre otros.
  • Obesidad: puede ser causada por una ingesta excesiva de alimentos y una actividad física inadecuada, lo que puede aumentar el riesgo de una serie de afecciones de salud, como enfermedades cardíacas, diabetes, presión arterial alta, entre otras.
  • Deshidratación: puede ocurrir cuando el cuerpo no tiene suficiente agua para funcionar correctamente, lo que puede provocar fatiga, mareos, dolores de cabeza, sequedad en la boca y en la piel, disminución de la función cognitiva, entre otros síntomas.
  • Hipovitaminosis: una deficiencia de vitaminas y minerales en la dieta puede conducir a una variedad de problemas de salud, como debilidad muscular, anemia, problemas de visión, problemas de crecimiento y desarrollo en los niños, entre otros.
  • Trastornos alimentarios: pueden incluir anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y trastornos por atracón, que pueden tener graves consecuencias para la salud, como problemas cardíacos, debilidad muscular, problemas gastrointestinales, desequilibrios electrolíticos y complicaciones psicológicas.

Cuidados Enfermeros de Nutrición e Hidratación

  • Realizar una historia clínica completa: Se debe incluir una revisión de los registros de salud del paciente y entrevistar al paciente y a su familia para obtener información sobre sus hábitos alimentarios, preferencias y restricciones dietéticas, así como posibles problemas de alimentación.
  • Realizar una evaluación nutricional: Puede incluir medir el peso, la altura y el índice de masa corporal (IMC) del paciente, y comparar los resultados con los valores normales para su edad y género.
  • Realizar una evaluación del riesgo nutricional: Incluir la realización de pruebas de laboratorio para evaluar los niveles de nutrientes.
  • Registro de alergias alimentarias e intolerancias: La enfermera puede llevar un registro de las alergias alimentarias y las intolerancias del paciente para evitar su exposición a estos alimentos y garantizar una alimentación segura y adecuada.
  • Observar la apariencia del paciente: Incluyendo su piel, cabello y uñas, para detectar signos de malnutrición o deficiencia de nutrientes.
  • Educación sobre hábitos alimenticios saludables: La enfermera puede enseñar sobre la importancia de una dieta equilibrada y variada, el consumo adecuado de líquidos, la identificación de alimentos nutritivos y la elaboración de menús saludables.
  • Evaluar la capacidad del paciente para masticar y tragar: Ofrecer asistencia para la alimentación si es necesario.
  • Realizar una evaluación del entorno alimentario del paciente: Se debe incluir la disponibilidad y accesibilidad de los alimentos y la calidad de la comida que se le sirve.
  • Asesoramiento nutricional: La enfermera puede ofrecer asesoramiento nutricional individualizado según las necesidades y preferencias del paciente, y recomendar ajustes en la dieta o la ingesta de nutrientes en función de la edad, el sexo, la actividad física y las condiciones médicas del paciente.

Datos y estadísticas relevantes

  • Alrededor de 2.000 millones de adultos padecen sobrepeso u obesidad, aumentando el riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer (OMS).

  • Aproximadamente una de cada nueve personas en el mundo sufre de hambre crónica, según la FAO.

  • La desnutrición subyace en cerca del 45% de las muertes de niños menores de 5 años a nivel mundial (OMS).

  • Enfermedades gastrointestinales como la enfermedad inflamatoria intestinal y el síndrome del intestino irritable pueden afectar la capacidad de una persona para comer y beber adecuadamente.

  • La diabetes tipo 2, vinculada a la obesidad y el sedentarismo, afecta a más de 400 millones de personas globalmente.

  • Una dieta saludable y equilibrada, rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras, reduce el riesgo de enfermedades crónicas, según un estudio del American Journal of Clinical Nutrition.

  • La desnutrición es la causa subyacente del 45% de las muertes de niños menores de 5 años en todo el mundo, según la OMS.

  • Según el informe conjunto de la OMS, la FAO y otros organismos de la ONU, el número de personas con hambre ha aumentado, alcanzando los 811 millones en 2020, un aumento de 161 millones en relación a 2019.

  • La malnutrición se vincula con enfermedades crónicas como la diabetes, obesidad, hipertensión y enfermedades cardiovasculares (Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics).

  • Los trastornos alimentarios como la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa afectan principalmente a mujeres jóvenes, poniendo en riesgo su salud y vida.

  • Trastornos de la conducta alimentaria, como la alimentación emocional y el trastorno por atracón, interfieren con la capacidad de una persona para comer y beber adecuadamente, con consecuencias graves para la salud física y mental.

3. Necesidad de eliminar normalmente por todas las vías

La necesidad de eliminar normalmente por todas las vías es esencial en enfermería, abordando la capacidad del organismo para expulsar desechos y toxinas mediante procesos metabólicos autónomos.

Este aspecto clave incluye la adecuada eliminación de orina y heces, así como la mantenimiento de una higiene íntima para prevenir infecciones y problemas de salud asociados.

Además, la necesidad abarca la eliminación de otros desechos corporales como sudor y saliva, contribuyendo a una higiene integral.

En el ámbito de la enfermería, se lleva a cabo una evaluación y promoción activa de esta necesidad para salvaguardar la salud del paciente.

La eliminación normal implica que el cuerpo pueda desechar regular y sin esfuerzo los desechos, abarcando la orina, las heces y el sudor.

Interrupciones o ineficiencias en estos procesos pueden dar lugar a problemas de salud como estreñimiento, incontinencia urinaria o fecal, retención urinaria, cistitis, entre otros.

La atención enfermera se focaliza en mantener estos procesos de eliminación de manera óptima para preservar el bienestar del paciente.

Afecciones derivadas de una eliminación inadecuada

  • Estreñimiento crónico: se produce cuando las heces se acumulan en el colon y no se eliminan regularmente. Esto puede provocar dolor, malestar abdominal, inflamación, entre otros síntomas.
  • Hemorroides: son venas inflamadas en el recto y el ano, que pueden provocar dolor, picor y sangrado.
  • Fisuras anales: son pequeñas heridas en el tejido anal que pueden producirse por el paso de heces duras o grandes, causando dolor y malestar.
  • Infecciones urinarias: pueden producirse cuando las bacterias ingresan en la vejiga o en los riñones debido a una eliminación inadecuada de la orina.
  • Cálculos renales: se pueden formar cuando los minerales se acumulan en los riñones, lo que puede ocurrir si la orina no se elimina adecuadamente.
  • Incontinencia urinaria o fecal: es la pérdida involuntaria de orina o heces debido a una debilidad en los músculos del suelo pélvico.
  • Prolapso rectal: ocurre cuando parte del recto sobresale del ano, lo que puede ocurrir si los músculos del suelo pélvico están debilitados debido a una eliminación inadecuada.
  • Impactación fecal: se produce cuando las heces se acumulan en el recto y se endurecen, lo que dificulta su eliminación y puede provocar dolor y malestar.
  • Enterocolitis necrotizante en recién nacidos: es una afección grave que se produce cuando los tejidos del intestino se inflaman y se dañan, lo que puede ocurrir si las heces no se eliminan adecuadamente en los bebés recién nacidos.
  • Enfermedad inflamatoria intestinal: cuando el sistema inmunológico del cuerpo ataca el revestimiento del tracto gastrointestinal.
  • Cistitis: inflamación de la vejiga que causa dolor al orinar.
  • Diverticulitis: inflamación de las bolsas en el intestino que pueden causar dolor abdominal, fiebre y náuseas.
  • Obstrucción intestinal: bloqueo del intestino que puede causar dolor abdominal intenso, náuseas y vómitos.
  • Cáncer colorrectal: crecimiento anormal de células en el colon o el recto que pueden ser malignas.

Acciones de enfermería para evaluar la necesidad de eliminar normalmente 

  • Revisar los antecedentes médicos y la medicación del paciente para identificar cualquier trastorno que pueda afectar la eliminación.
  • Realizar una evaluación física para identificar signos de incontinencia, dolor, distensión abdominal, retención urinaria, entre otros.
  • Observar la cantidad y calidad de la orina y las heces del paciente.
  • Realizar pruebas de laboratorio como análisis de orina o pruebas de función renal.
  • Evaluar la higiene corporal y la capacidad del paciente para realizar actividades de eliminación de manera autónoma.
  • Educar al paciente sobre la importancia de una buena higiene personal y los factores que afectan la eliminación adecuada, como la ingesta de líquidos y la actividad física.
  • Proporcionar medidas de cuidado, como cambios de posición, terapia de líquidos, enemas, cateterismo y terapia farmacológica, según sea necesario.
  • Medición de la diuresis para evaluar el funcionamiento renal del paciente.
  • Seguimiento de la consistencia y frecuencia de las deposiciones del paciente para detectar posibles problemas de estreñimiento o diarrea.
  • Evaluación de la piel perianal y genital para detectar signos de irritación, infección o lesiones.
  • Educación al paciente sobre la importancia de una buena higiene perineal y sobre la adopción de hábitos alimenticios y de actividad física adecuados para favorecer una eliminación normal y saludable.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 2.000 millones de personas en todo el mundo no tienen acceso a instalaciones de saneamiento básicas y al menos 1.000 millones practican la defecación al aire libre.
  • La frecuencia normal de la defecación varía de una persona a otra, pero se considera normal tener de 3 evacuaciones por semana a 3 evacuaciones por día.
  • La diuresis normal en adultos es de aproximadamente 0,5 a 1,5 ml/kg/hora.
  • La realización de una prueba de análisis de orina puede ayudar a detectar problemas renales, infecciones urinarias o cálculos renales.
  • El uso de pañales en adultos mayores o pacientes encamados puede aumentar el riesgo de infecciones del tracto urinario y problemas cutáneos relacionados con la humedad.
  • La evaluación de la consistencia y frecuencia de las deposiciones es un indicador importante del funcionamiento del sistema digestivo y puede ayudar a detectar posibles problemas como el estreñimiento.
  • La realización de una evaluación de la piel perianal y genital puede ayudar a detectar signos de infección, lesiones o irritación.
  • El estreñimiento afecta a aproximadamente el 20% de la población adulta y se asocia con un mayor riesgo de hemorroides, fisuras anales y otros problemas de eliminación.

4. Necesidad de moverse y mantener posturas adecuadas

La necesidad de moverse y mantener posturas adecuadas se centra en la capacidad de una persona para desplazarse de manera autónoma o con la ayuda de dispositivos mecánicos como sillas de ruedas o andadores.

Incluye la habilidad para realizar cambios posturales apropiados, evitando así la formación de úlceras por presión y otros problemas vinculados a la inmovilidad prolongada.

También abarca la capacidad de llevar a cabo pequeñas tareas en el hogar para mejorar el confort y el bienestar general.

La carencia de movimiento y la adopción de posturas inadecuadas pueden ocasionar diversos problemas de salud, tanto físicos como psicológicos, impactando negativamente en la calidad de vida.

Por consiguiente, resulta esencial mantener una buena movilidad y posturas adecuadas para prevenir la aparición de problemas de salud y fomentar el bienestar general.

En el ámbito de la enfermería, la evaluación de la capacidad de movimiento y la adopción de posturas adecuadas adquiere relevancia, especialmente en pacientes en situación de dependencia o con limitaciones físicas.

Este enfoque permite diseñar intervenciones adecuadas para preservar la movilidad y prevenir complicaciones asociadas a la inmovilidad.

Problemas de no moverse o mantener una postura adecuada

  • Dolor muscular y articular: la falta de movimiento y la adopción de posturas inadecuadas pueden generar dolores musculares y articulares, especialmente en la espalda, el cuello y las piernas. Esto puede afectar la calidad de vida y la capacidad para realizar actividades diarias.
  • Contracturas musculares: la inactividad prolongada o la adopción de posturas incorrectas pueden llevar a contracturas musculares, que son espasmos involuntarios de los músculos que pueden causar dolor y limitar la movilidad.
  • Úlceras por presión: las personas que permanecen en la misma posición durante largos períodos de tiempo, especialmente aquellas con movilidad reducida, tienen un mayor riesgo de desarrollar úlceras por presión.
  • Pérdida de masa muscular y fuerza: la falta de actividad física puede provocar la pérdida de masa muscular y fuerza, lo que puede aumentar el riesgo de caídas y lesiones.
  • Dificultad para respirar: la falta de movimiento y la adopción de posturas inadecuadas pueden comprometer la capacidad pulmonar, lo que puede dificultar la respiración y aumentar el riesgo de enfermedades respiratorias.
  • Trastornos circulatorios: la falta de movimiento puede afectar la circulación sanguínea y aumentar el riesgo de trombosis venosa profunda y otras enfermedades circulatorias.
  • Problemas de equilibrio y coordinación: la falta de movimiento y la adopción de posturas incorrectas pueden afectar el equilibrio y la coordinación, lo que puede aumentar el riesgo de caídas y lesiones.
  • Disminución de la movilidad articular: la falta de movimiento puede generar rigidez y disminución de la movilidad articular, lo que puede dificultar la realización de actividades diarias y disminuir la calidad de vida.
  • Mayor dependencia: la falta de movimiento y la adopción de posturas incorrectas pueden llevar a una mayor dependencia de la ayuda de otras personas o de medios mecánicos para realizar actividades diarias y desplazarse.

Cuidados Enferos para moverse y mantener posturas adecuadas

  • Evaluar la capacidad de movimiento del paciente y su necesidad de asistencia.
  • Realizar ejercicios de movilidad y fortalecimiento muscular junto con el paciente.
  • Evaluar y corregir las posturas incorrectas del paciente y enseñar ejercicios para mejorar la alineación corporal.
  • Proporcionar dispositivos de ayuda para la movilidad, como andadores o sillas de ruedas, y enseñar al paciente a utilizarlos adecuadamente.
  • Proporcionar dispositivos de apoyo para mantener una postura adecuada, como almohadas o cojines, y enseñar al paciente a utilizarlos correctamente.
  • Evaluar y tratar úlceras por presión o escaras causadas por una postura incorrecta o una movilización insuficiente.
  • Valoración del estado de movilidad del paciente, teniendo en cuenta su capacidad para realizar actividades de la vida diaria y su necesidad de ayuda o asistencia.
  • Evaluación de la postura del paciente y de las posibles limitaciones o dolores que pueda presentar.
  • Establecimiento de un plan de cuidados individualizado que incluya medidas preventivas para evitar la aparición de úlceras por presión, caídas y contracturas musculares.
  • Fomento de la movilización precoz y de la realización de ejercicios físicos adecuados a las necesidades y capacidades del paciente.
  • Asistencia en la realización de cambios posturales y en el uso de dispositivos de ayuda a la movilidad, como andadores o sillas de ruedas.
  • Brindar educación al paciente y su familia sobre la importancia de mantener una postura adecuada y de realizar ejercicios físicos regulares para mejorar la movilidad y prevenir complicaciones.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la inactividad física es el cuarto factor de riesgo de mortalidad más importante en todo el mundo.
  • Según un estudio publicado en la revista científica The Lancet en 2012, la falta de actividad física causa aproximadamente el 6% de las muertes en todo el mundo.
  • La inmovilidad prolongada puede llevar a una serie de complicaciones graves, como úlceras por presión, pérdida de masa muscular, trombosis venosa profunda, contracturas y osteoporosis.
  • La evaluación de la capacidad de movimiento y postura adecuadas puede realizarse mediante la escala de movilidad de Tinetti, que evalúa la capacidad de la persona para realizar diferentes movimientos, como sentarse y levantarse de una silla o caminar.
  • La identificación temprana de problemas de movilidad y postura puede prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de los pacientes, por lo que es importante que se realice una evaluación exhaustiva en todos los pacientes, especialmente en aquellos con factores de riesgo como la edad avanzada o las enfermedades crónicas.
  • La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los adultos realicen al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa a la semana.
  • Además, se sugiere realizar actividades de fortalecimiento muscular al menos dos veces por semana.
  • Es importante tener en cuenta que estas pautas pueden variar según la edad, el estado de salud y otros factores individuales.
necesidades basicas de virginia henderson

La necesidad de moverse y mantener posturas adecuadas se centra en la capacidad de una persona para desplazarse de manera autónoma o con la ayuda de dispositivos mecánicos como sillas de ruedas o andadores

5. Necesidad de dormir y descansar

La necesidad básica de dormir y descansar se centra en la capacidad de una persona para obtener la cantidad suficiente de sueño que le permita sentirse renovada y enérgica.

El sueño es esencial para la salud física y mental, y la falta de sueño adecuado puede tener efectos negativos en el bienestar general.

Gestionar la fatiga y mantener un nivel de energía adecuado son cruciales para asegurar que la persona tenga la vitalidad y el enfoque necesarios para cumplir con las actividades diarias y responsabilidades.

La cantidad de sueño necesaria puede variar según la edad, la salud y otros factores individuales. En términos generales, se recomienda que los adultos duerman entre 7 y 9 horas por noche, aunque algunas personas pueden requerir más o menos.

La falta de sueño adecuado puede resultar en problemas de salud como obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y depresión.

Además de la cantidad de sueño, la calidad del mismo es igualmente esencial. Una persona puede dormir la cantidad suficiente de horas, pero si no tiene un sueño reparador, puede sentirse cansada y fatigada durante el día.

La gestión efectiva de la fatiga y la optimización del nivel de energía son aspectos fundamentales. Una persona que no pueda manejar adecuadamente su nivel de energía puede experimentar agotamiento físico y mental, lo que dificulta la realización de actividades cotidianas.

Problemas de no dormir o descansar

  • Fatiga: la falta de sueño adecuado puede provocar una sensación de cansancio constante, lo que puede afectar la capacidad de la persona para realizar sus actividades diarias.
  • Dificultad para concentrarse: la privación del sueño también puede afectar la capacidad de una persona para concentrarse y realizar tareas con eficacia.
  • Irritabilidad y cambios de humor: la falta de sueño puede afectar el estado de ánimo de la persona, lo que puede provocar irritabilidad, cambios de humor y estrés emocional.
  • Problemas de memoria: la privación del sueño también puede afectar la capacidad de una persona para procesar y recordar información, lo que puede afectar su capacidad para realizar tareas y aprender cosas nuevas.
  • Problemas de salud: la falta de sueño también puede afectar el sistema inmunológico, aumentando el riesgo de enfermedades e infecciones.
  • Problemas de peso: la falta de sueño puede afectar el metabolismo del cuerpo, lo que puede provocar aumento de peso o dificultad para perder peso.
  • Mayor riesgo de accidentes: la falta de sueño también puede aumentar el riesgo de accidentes, ya que puede afectar la capacidad de la persona para estar alerta y reaccionar rápidamente a situaciones de peligro.
  • Disminución del rendimiento cognitivo y motor: la falta de sueño puede afectar negativamente el rendimiento cognitivo, la atención, la memoria, la toma de decisiones y la coordinación motora.
  • Problemas emocionales: la falta de sueño puede afectar negativamente el estado de ánimo, aumentando el riesgo de depresión, ansiedad y estrés.
  • Problemas de salud: la falta de sueño también se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, diabetes y obesidad.
  • Afectación del sistema inmunológico: el sueño es importante para la regulación del sistema inmunológico y la falta de sueño puede debilitar las defensas del cuerpo contra enfermedades e infecciones.

Evaluación Enfermera de la «Necesidad de Dormir y Descansar»

  • Educación del paciente: La enfermera puede educar al paciente sobre la importancia del sueño y los efectos negativos de la falta de sueño en la salud. También puede proporcionar consejos para mejorar la higiene del sueño, como evitar la cafeína y el alcohol antes de dormir, mantener un horario regular de sueño y mantener un ambiente de sueño tranquilo y oscuro.
  • Uso de técnicas de relajación: La enfermera puede enseñar al paciente técnicas de relajación, como la meditación o la respiración profunda, para ayudar a reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño.
  • Terapia cognitivo-conductual (TCC): La TCC es una forma de terapia que se centra en cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento que pueden estar contribuyendo a los trastornos del sueño. La enfermera puede trabajar con el paciente para identificar y cambiar estos patrones.
  • Medicamentos para dormir: La enfermera puede trabajar con el médico del paciente para determinar si es necesario recetar medicamentos para ayudar al paciente a dormir mejor. Es importante que la enfermera proporcione educación sobre el uso adecuado de estos medicamentos y los posibles efectos secundarios.
  • Monitoreo y seguimiento: La enfermera puede monitorear la calidad del sueño del paciente y evaluar regularmente su progreso. También puede trabajar con el paciente para ajustar las intervenciones de cuidado en función de sus necesidades cambiantes.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la National Sleep Foundation, los adultos entre 18 y 64 años necesitan de 7 a 9 horas de sueño cada noche para funcionar de manera óptima.
  • Dormir menos de 6 horas al día se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, diabetes y obesidad.
  • La privación del sueño también puede tener efectos negativos en el estado de ánimo, la concentración y la productividad.
  • El trastorno del sueño más común es el insomnio, que afecta a alrededor del 30% de la población mundial.
  • La apnea del sueño es otro trastorno común del sueño, que afecta a aproximadamente el 5% de la población adulta.
  • La polisomnografía es una prueba diagnóstica que se realiza para evaluar la calidad del sueño y detectar posibles trastornos del sueño.
  • Los patrones de sueño adecuados incluyen un horario regular de sueño y vigilia, evitar estimulantes como la cafeína antes de acostarse y crear un ambiente propicio para el sueño, como mantener la habitación oscura y tranquila.

6. Necesidad de escoger ropa adecuada, vestirse y desvestirse

La necesidad de vestirse y desvestirse adecuadamente, así como la capacidad de elegir y comprar ropa de forma autónoma, constituye una esfera fundamental de la autonomía humana.

Implica habilidades básicas como manipular prendas, abotonar y desabotonar, entre otras.

Esta capacidad es esencial para la autonomía en la vida diaria y se relaciona con la elección de la ropa adecuada para mantener la salud y la comodidad, adaptándose a diversas situaciones y condiciones climáticas.

Además, va más allá de lo funcional, ya que la elección de la ropa se convierte en una forma de expresar la identidad personal, cultural y social.

La ropa y la moda son elementos significativos de la cultura, reflejando la personalidad, gustos, valores y tradiciones de cada individuo. La elección de la vestimenta puede influir en la autoestima y el bienestar emocional.

Es importante destacar que factores como la edad, la discapacidad o la enfermedad pueden afectar la capacidad de vestirse y desvestirse adecuadamente.

Por tanto, los profesionales de enfermería deben realizar evaluaciones minuciosas de las necesidades y habilidades individuales de cada persona, brindando la asistencia y el apoyo necesarios para preservar la autonomía en esta área.

Afecciones derivadas de no escoger ropa adecuada, vestirse o desvestirse

  • Infecciones de la piel: si la ropa no es adecuada para el clima o la actividad que se está realizando, la piel puede irritarse y desarrollar infecciones.
  • Lesiones musculares: si la ropa no es adecuada para la actividad física que se está realizando, puede haber lesiones musculares y articulares.
  • Limitaciones en la movilidad: si la ropa no es cómoda o no se ajusta adecuadamente, puede limitar la movilidad y causar incomodidad y dolor.
  • Problemas de autoestima: la ropa puede tener un impacto en la autoestima y la confianza de una persona, por lo que vestirse de manera inadecuada puede afectar negativamente el bienestar emocional.
  • Problemas sociales: vestirse de manera inadecuada también puede tener consecuencias sociales, ya que puede hacer que una persona se sienta excluida o marginada en determinados entornos.
  • Accidentes: si la ropa no es adecuada para la actividad que se está realizando, puede haber más posibilidades de sufrir accidentes, como resbalones o tropiezos.

Evaluación de la «Necesidad de Dormir y Descansar»

  • Proporcionar ayudas técnicas, como ganchos o dispositivos para abotonar, que faciliten el manejo de las prendas.
  • Enseñar técnicas para vestirse y desvestirse que permitan a la persona realizar estas actividades de forma más sencilla y autónoma.
  • Proporcionar información sobre la adaptación de la ropa y la selección de prendas cómodas y seguras para personas con discapacidades o problemas de movilidad.
  • Brindar información sobre recursos y servicios para la compra de ropa adaptada o la adaptación de prendas existentes.
  • Trabajar en conjunto con el paciente y su familia para desarrollar planes de atención personalizados que aborden sus necesidades individuales en relación a la vestimenta y los cuidados personales.
  • La enfermera debe proporcionar asistencia y cuidados que permitan a la persona mantener su independencia en lo posible.

Datos y estadísticas relevantes

  • La capacidad para vestirse y desvestirse puede variar según la edad y la salud del individuo.
  • La mayoría de las personas mayores de 65 años pueden vestirse solas, aunque algunos requieren asistencia en áreas específicas.
  • Un estudio en el Reino Unido encontró que la edad promedio en la que los niños comenzaban a vestirse solos era de alrededor de 4 años y medio.
  • Los niños con ciertas discapacidades o retrasos en el desarrollo pueden tener dificultades para vestirse y desvestirse solos.
  • La capacidad para vestirse y desvestirse de manera independiente es un indicador importante del nivel de autonomía y autoestima de una persona, independientemente de su edad.

7. Necesidad de Mantener la temperatura del cuerpo en los rangos normales.

La necesidad básica de mantener la temperatura corporal dentro de límites normales es esencial para la supervivencia y el bienestar general. La capacidad de ajustar la vestimenta y modificar la temperatura ambiental resulta crucial para lograr este equilibrio.

El cuerpo humano, con una temperatura normal de alrededor de 36-37 grados Celsius, cuenta con mecanismos reguladores para adaptarse a cambios ambientales.3

En ambientes fríos, vestirse con ropa abrigada y proteger extremidades como manos y pies evita la pérdida excesiva de calor. En contraste, en climas cálidos, utilizar ropa ligera permite la evaporación del sudor y previene el aumento excesivo de la temperatura corporal.

Además, la capacidad de abrir y cerrar ventanas según las condiciones climáticas es fundamental.

En climas cálidos, la ventilación puede disipar el calor, mientras que en climas fríos, mantener las ventanas cerradas contribuye a conservar el calor.

Problemas de no mantener la temperatura adecuada

  • Hipotermia: se produce cuando la temperatura corporal desciende por debajo de lo normal, lo que puede provocar una serie de síntomas como escalofríos, piel fría y pálida, dificultad para hablar, confusión mental, fatiga, entre otros. Si no se trata adecuadamente, puede ser potencialmente mortal.
  • Hipertermia: se produce cuando la temperatura corporal aumenta por encima de lo normal, lo que puede provocar síntomas como sudoración excesiva, piel caliente y seca, dolor de cabeza, náuseas, mareos, entre otros. En casos graves, puede provocar daño cerebral e incluso la muerte.
  • Quemaduras: una exposición prolongada al frío extremo o al calor extremo puede provocar quemaduras en la piel.
  • Deshidratación: cuando la temperatura del cuerpo es demasiado alta, se puede perder una cantidad significativa de líquidos a través de la sudoración, lo que puede provocar deshidratación.
  • Infecciones respiratorias: estar expuesto a temperaturas extremadamente frías puede aumentar el riesgo de infecciones respiratorias, como la neumonía, especialmente en personas mayores y con sistema inmunológico debilitado.
  • Lesiones musculares: una exposición prolongada a temperaturas extremadamente frías puede provocar lesiones musculares, especialmente en deportes de invierno o en trabajos que requieren estar en ambientes fríos por largos períodos de tiempo.

Cuidados Enfermeros para mantener la temperatura adecuada

  • Ajustar la temperatura del ambiente: Si la habitación está demasiado fría o demasiado caliente, es necesario ajustar la temperatura para que el paciente se sienta cómodo y la temperatura corporal se mantenga dentro de los límites normales.
  • Proporcionar ropa adecuada: Si el paciente está usando ropa inadecuada, la enfermera puede proporcionar ropa más adecuada para mantener la temperatura corporal dentro de los límites normales.
  • Proporcionar mantas o compresas: Si el paciente presenta signos de hipotermia, es necesario proporcionar mantas o compresas calientes para ayudar a restablecer la temperatura corporal. Si el paciente presenta signos de hipertermia, es necesario proporcionar compresas frías o ventiladores para ayudar a reducir la temperatura corporal.
  • Controlar la temperatura corporal: Es importante controlar la temperatura corporal del paciente de forma regular para detectar cualquier cambio y tomar medidas inmediatas en caso de que sea necesario.

Datos y estadísticas relevantes

  • La temperatura corporal normal en adultos oscila entre los 36,1 y 37,2 grados Celsius.
  • Los bebés y los niños pequeños pueden tener una temperatura corporal un poco más alta que los adultos, en torno a los 37,5 grados Celsius.
  • La fiebre se define como una temperatura corporal superior a los 38 grados Celsius.
  • La hipotermia se define como una temperatura corporal inferior a los 35 grados Celsius.
  • Algunas enfermedades, como la fiebre del heno y la urticaria, pueden ser desencadenadas por cambios bruscos en la temperatura ambiental.
  • La sudoración excesiva o la falta de sudoración pueden ser signos de problemas en la regulación de la temperatura corporal.
  • La evaluación de la necesidad de mantener la temperatura corporal dentro de límites normales incluye la observación de la temperatura corporal, la monitorización de los signos vitales y la evaluación del entorno.
  • La enfermera puede ayudar al paciente a regular su temperatura corporal mediante la selección adecuada de la ropa y la modificación de la temperatura ambiental.
  • En casos de hipotermia o hipertermia grave, se pueden utilizar técnicas de enfriamiento o calentamiento externo, como mantas térmicas o compresas frías, bajo supervisión médica.
  • Un estudio publicado en la revista «Age and Ageing» encontró que la hipotermia es una causa significativa de mortalidad y morbimortalidad en personas mayores, especialmente en pacientes hospitalizados y en aquellos con enfermedades crónicas.
  • Se ha demostrado que el uso de ropa adecuada y la modificación de la temperatura ambiental pueden mejorar la calidad de vida y reducir el riesgo de hipotermia en personas mayores y pacientes hospitalizados.
Necesidades básicas de Virginia Henderson

8. Necesidad de mantener la higiene corporal y la integridad de la piel

La necesidad de mantener la higiene corporal y la integridad de la piel es esencial para el bienestar general y la conformidad personal. Implica la capacidad de la persona para realizar actividades de aseo, utilizando productos y utensilios para cuidar de su piel, cabello, uñas, dientes, encías y más.

Mantener el cuerpo limpio y libre de microorganismos dañinos es fundamental para prevenir enfermedades y promover la salud.

Las prácticas de higiene corporal incluyen bañarse regularmente, lavarse las manos antes de comer o después de ir al baño, cepillarse los dientes y el cabello, y usar ropa limpia.

La integridad de la piel, por otro lado, se refiere a mantener la piel sana, protegida y libre de lesiones. Esto implica mantener la piel limpia y seca, hidratarla para prevenir sequedad y grietas, protegerla de la exposición excesiva al sol y prevenir la formación de heridas y lesiones en la piel.

En resumen, la capacidad de la persona para cuidar de su higiene corporal y mantener la integridad de la piel contribuye al bienestar general y a una mayor conformidad consigo misma.

Problemas de no mantener una buena higiene corporal

  • Infecciones: La acumulación de suciedad, sudor y bacterias en la piel puede provocar infecciones cutáneas como celulitis, foliculitis y abscesos.
  • Olor corporal: La falta de higiene corporal adecuada puede resultar en mal olor corporal, afectando negativamente la autoestima y las relaciones interpersonales.
  • Irritación de la piel: La acumulación de suciedad y sudor en la piel puede causar irritación e inflamación, especialmente en áreas como las axilas y la ingle.
  • Dermatitis del pañal: La falta de higiene en bebés y personas mayores que usan pañales puede causar dermatitis del pañal.
  • Úlceras por presión: Personas con movilidad reducida o que pasan mucho tiempo en la cama o en una silla de ruedas pueden desarrollar úlceras por presión.
  • Enfermedades de transmisión sexual: La falta de higiene corporal adecuada puede aumentar el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.
  • Acné: La falta de higiene facial adecuada puede contribuir a la formación de acné y otros problemas de la piel.
  • Pioderma: La falta de higiene en las manos y los pies puede llevar a una infección bacteriana de la piel llamada pioderma.
  • Pie de atleta: La falta de higiene en los pies y el uso de calzado inadecuado pueden causar el pie de atleta, una infección fúngica de la piel de los pies.
  • Gingivitis: La falta de higiene dental adecuada puede llevar a la gingivitis, una inflamación de las encías que puede causar sangrado y dolor.
  • Infecciones cutáneas: La falta de higiene puede aumentar el riesgo de infecciones de la piel, como el impétigo o la tiña.
  • Deshidratación: No mantener la piel limpia y bien hidratada puede llevar a una piel seca y agrietada, aumentando el riesgo de deshidratación.
  • Problemas de salud mental: La falta de higiene personal puede afectar negativamente la autoestima.

Cuidados enfermeros para mantener una buena higiene

  • Ayudar al paciente a bañarse o asearse si es necesario: Ofrecer asistencia al paciente para garantizar una higiene corporal adecuada.
  • Enseñar al paciente sobre las técnicas adecuadas de higiene personal y cuidado de la piel: Proporcionar educación al paciente para que pueda realizar las prácticas de higiene personal y cuidado de la piel de manera autónoma.
  • Ayudar al paciente a vestirse y arreglarse: Brindar apoyo al paciente en el proceso de vestirse y arreglarse, asegurando su comodidad y bienestar.
  • Evaluar y cambiar las sábanas y la ropa de cama del paciente según sea necesario: Realizar evaluaciones regulares y cambios en la ropa de cama para mantener un entorno limpio y cómodo.
  • Proporcionar atención adecuada a las heridas y lesiones de la piel: Ofrecer cuidados especializados a heridas y lesiones, asegurando una cicatrización adecuada y previniendo infecciones.
  • Monitorear y controlar la incontinencia y la humedad: Gestionar la incontinencia y mantener la piel seca para prevenir irritaciones y complicaciones asociadas.
  • Fomentar el uso de cremas hidratantes y otros productos de cuidado de la piel adecuados: Recomendar y facilitar el uso de productos que mantengan la piel hidratada y saludable.
  • Identificar y tratar las condiciones médicas que puedan afectar la piel y la higiene personal del paciente, como la diabetes o la enfermedad de Parkinson: Realizar evaluaciones integrales para abordar condiciones médicas específicas y adaptar los cuidados según las necesidades individuales del paciente.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la higiene corporal adecuada es fundamental para prevenir enfermedades infecciosas y mejorar la salud en general.
  • Un estudio publicado en la revista Journal of Clinical Nursing encontró que la falta de higiene personal en pacientes hospitalizados puede aumentar el riesgo de infecciones nosocomiales.
  • Varios estudios realizados en geriátricos encontraron que la falta de higiene personal y la falta de cambio de ropa de cama y vestimenta pueden aumentar el riesgo de úlceras por presión.
  • La evaluación de la integridad de la piel puede realizarse mediante el uso de escalas de valoración como la Escala de Braden o la Escala de Norton, que ayudan a identificar el riesgo de desarrollo de úlceras por presión.
  • Las técnicas de lavado de manos adecuadas pueden reducir significativamente la propagación de infecciones en entornos de atención médica y en la comunidad en general.
  • El uso de productos de limpieza y cuidado personal adecuados puede ayudar a prevenir la irritación y el deterioro de la piel.
  • Según la OMS, las tasas de mortalidad infantil en países de bajos ingresos pueden reducirse hasta en un 50% mediante la implementación de prácticas de higiene adecuadas, como el lavado de manos con agua y jabón.

 

9. Necesidad de evitar los peligros ambientales y evitar lesionar a otras personas

La necesidad de mantener y promover la propia integridad física y mental, así como la de terceros, se centra en la seguridad física y emocional de la persona y su entorno.

Algunas acciones relacionadas con esta necesidad básica incluyen:

  • Identificar peligros en el entorno y tomar medidas para reducir o eliminarlos.
  • Evitar situaciones que puedan poner en peligro la seguridad propia o de otras personas.
  • Conocer y seguir las normas de seguridad en el trabajo y otros entornos.
  • Mantener condiciones seguras en el hogar, la escuela o el lugar de trabajo.
  • Conocer y practicar técnicas de primeros auxilios y saber cómo responder en emergencias.
  • Aprender a manejar situaciones emocionales difíciles, como la ira o la frustración, de manera segura y constructiva.

En resumen, esta necesidad se centra en la capacidad de la persona para prevenir lesiones y garantizar un entorno seguro y saludable tanto para sí misma como para los demás.

Problemas de no evitar peligros ambientales

  • Lesiones: Las personas que no son conscientes de los peligros ambientales pueden sufrir lesiones por caídas, golpes o cortes. Asimismo, aquellas que no evitan lesionar a otras personas pueden causar daño a otras personas de manera accidental.
  • Enfermedades: La exposición a sustancias tóxicas o alérgenos presentes en el ambiente puede provocar enfermedades respiratorias o de la piel. Por otro lado, si las personas no evitan lesionar a otras personas, pueden transmitir enfermedades infecciosas.
  • Estrés: Vivir en un ambiente peligroso puede causar estrés y ansiedad en las personas, especialmente si tienen que preocuparse constantemente por su seguridad. También pueden sentirse culpables si lesionan a otra persona de manera accidental.
  • Daño emocional: Las personas que no evitan lesionar a otras personas pueden causar daño emocional a otros, especialmente si se trata de un acto intencional. Esto puede provocar sentimientos de enojo, miedo o tristeza en la persona afectada.
  • Daño financiero: Si no se evitan los peligros ambientales, puede haber pérdida de propiedad o daños materiales. Por ejemplo, si una persona vive en un área con alto riesgo de inundaciones y no se toman medidas de prevención, se puede sufrir pérdidas económicas significativas.

 Cuidados Enfermeros para evitar peligros ambientales

  • Evaluar y mejorar la seguridad del entorno del paciente: La enfermera debe inspeccionar el entorno del paciente para identificar posibles obstáculos y riesgos. Luego, tomar medidas para eliminar o reducir estos peligros, garantizando un ambiente seguro.

  • Proporcionar educación sobre identificación y prevención de situaciones peligrosas: La enfermera debe instruir al paciente y a su familia sobre cómo reconocer y prevenir situaciones peligrosas. Además, explicar el uso adecuado de equipos médicos o dispositivos de asistencia para minimizar riesgos.

  • Monitorear constantemente al paciente para detectar posibles peligros: La enfermera debe realizar una supervisión continua del paciente, observando signos de cualquier situación de riesgo. Esto implica una vigilancia activa para intervenir rápidamente si surge alguna amenaza.

  • Identificar y tratar problemas de salud mental que afecten la seguridad: La enfermera debe evaluar la salud mental del paciente y abordar cualquier problema que pueda comprometer la seguridad. Esto puede incluir la gestión de trastornos que afecten el juicio o la percepción del entorno.

  • Proporcionar asistencia en actividades diarias para reducir riesgos de lesiones: La enfermera debe ayudar al paciente en actividades cotidianas como bañarse, vestirse y desplazarse. Esto no solo garantiza la seguridad del paciente durante estas actividades, sino que también minimiza el riesgo de lesiones.

  • Identificar y abordar comportamientos que puedan poner en riesgo a otros: La enfermera debe estar atenta a comportamientos del paciente que puedan afectar la seguridad de otras personas. Intervenir proactivamente para prevenir situaciones potencialmente peligrosas y garantizar un entorno seguro para todos.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2018, hubo aproximadamente 2,2 millones de muertes por lesiones no intencionales, lo que representa el 3,9% de todas las muertes en todo el mundo.
  • Las caídas son una de las principales causas de lesiones no intencionales en todo el mundo. Según la OMS, en 2018, las caídas fueron la segunda causa principal de muerte por lesiones no intencionales en todo el mundo, con aproximadamente 646,000 muertes.
  • Los niños menores de 5 años y los adultos mayores de 65 años tienen un mayor riesgo de lesiones no intencionales.
  • Según un informe de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) de EE. UU., Las lesiones y enfermedades relacionadas con el trabajo le cuestan al país alrededor de $170 mil millones al año.
  • Los peligros ambientales pueden incluir sustancias químicas tóxicas, radiación, humo, fuego, objetos afilados, bordes puntiagudos y superficies resbaladizas. Las medidas de seguridad, como la instalación de detectores de humo, la eliminación adecuada de desechos y la capacitación en seguridad laboral, pueden reducir el riesgo de lesiones no intencionales.
  • Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las caídas son la segunda causa de muerte accidental en todo el mundo, y la mayoría de ellas ocurren en personas mayores de 65 años.
  • El 90% de los accidentes en el hogar se pueden prevenir con medidas de seguridad adecuadas.

10. Necesidad de comunicarse con los demás expresando emociones, necesidades, temores y sensaciones

La necesidad de comunicarse y relacionarse con los demás es una parte fundamental de la experiencia humana, trascendiendo la mera transmisión de información.

Este aspecto es esencial para establecer y mantener relaciones significativas y satisfactorias con otras personas.

La comunicación, entendida como un proceso bidireccional, implica la transmisión y recepción de mensajes, y abarca tanto el lenguaje verbal como el no verbal. La expresión facial, los gestos, la postura y la mirada también juegan un papel crucial en este proceso.

La capacidad de expresar emociones, necesidades, temores y sensaciones a través de la comunicación es esencial para la satisfacción emocional y el bienestar psicológico.

La comunicación eficaz permite a los individuos sentirse comprendidos y apoyados, contribuyendo así a la construcción de relaciones significativas.

La falta de comunicación puede generar sentimientos de soledad, aislamiento y depresión. Además, la comunicación desempeña un papel crucial en la toma de decisiones, la resolución de conflictos y la cooperación en actividades comunes.

La habilidad para comunicarse efectivamente influye directamente en la calidad de las relaciones interpersonales y puede ser un factor determinante en el éxito de las interacciones sociales.

En resumen, la necesidad de comunicarse no solo se trata de intercambiar palabras, sino de establecer conexiones emocionales, expresar individualidad y participar activamente en el entramado social que caracteriza la experiencia humana.

Posibles Problemas

  • Aislamiento social: la falta de comunicación puede llevar a la persona a sentirse sola e incomprendida, lo que puede agravar problemas emocionales y de salud mental.
  • Estrés y ansiedad: la falta de comunicación efectiva puede generar estrés, ansiedad y otros problemas emocionales debido a la frustración y la sensación de no ser escuchado o entendido.
  • Falta de apoyo emocional: la comunicación es un medio para recibir y brindar apoyo emocional, y la falta de este apoyo puede aumentar el riesgo de depresión y otros problemas emocionales.
  • Problemas de autoexpresión: cuando una persona no se comunica efectivamente, puede tener dificultades para expresar sus emociones y necesidades, lo que puede llevar a una falta de autoconciencia y problemas en las relaciones interpersonales.
  • Problemas de relación interpersonal: La incapacidad de comunicar efectivamente las necesidades y emociones puede causar conflictos y problemas en las relaciones interpersonales, lo que puede tener un impacto negativo en la calidad de vida de una persona.

Cuidados de enfermería

  • Fomentar la comunicación abierta y honesta entre el paciente, el personal sanitario y la familia: El profesional debe crear un ambiente propicio para la expresión abierta de sentimientos y preocupaciones, alentando la participación activa de todos los involucrados en la atención del paciente.

  • Utilizar lenguaje sencillo y claro, adaptado al nivel de comprensión del paciente: El enfermero debe ajustar su comunicación según la capacidad y nivel de comprensión del paciente, utilizando un lenguaje claro y sencillo para garantizar una comprensión adecuada.

  • Establecer un ambiente tranquilo y cómodo para la comunicación, minimizando las distracciones y ruidos externos: Crear un entorno propicio para la comunicación, eliminando distracciones y asegurando que el paciente se sienta cómodo al compartir información o expresar sus inquietudes.

  • Proporcionar recursos de apoyo emocional, como la terapia ocupacional, la psicología o el trabajo social: El profesional debe facilitar el acceso a servicios de apoyo emocional, conectando al paciente con profesionales como terapeutas ocupacionales, psicólogos o trabajadores sociales según sea necesario.

  • Estimular la participación del paciente en actividades sociales y recreativas, como grupos de discusión, juegos de mesa y actividades al aire libre: Fomentar la participación del paciente en actividades sociales y recreativas como parte de un enfoque integral para mejorar la comunicación y el bienestar general.

  • Brindar información clara y precisa sobre su estado de salud y tratamiento: Proporcionar información detallada y comprensible sobre el estado de salud del paciente y el plan de tratamiento, empoderándolo con el conocimiento necesario para tomar decisiones informadas.

  • Proporcionar medios alternativos de comunicación: Facilitar el uso de tecnologías que permitan la comunicación remota, asegurando que el paciente pueda conectarse con seres queridos o profesionales de la salud que no estén físicamente presentes.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según un estudio publicado en la revista Journal of the American Medical Directors Association, los pacientes con demencia tienen una alta necesidad de comunicarse con los demás, pero a menudo experimentan barreras como la pérdida del lenguaje, la disminución de la capacidad de escuchar y la disminución de la capacidad de comprender.
  • Otra investigación encontró que la comunicación efectiva entre el personal de enfermería y los pacientes puede mejorar la calidad de atención, reducir el tiempo de hospitalización y disminuir el costo de la atención médica.
  • La afasia es una afección que puede afectar la capacidad de comunicarse y expresar emociones y necesidades.
  • Según la Asociación Americana del Habla, el lenguaje y la comunicación son afectados por la afasia en más de 2 millones de personas en los Estados Unidos.
  • La afasia puede ser causada por lesiones cerebrales traumáticas, accidentes cerebrovasculares, tumores cerebrales y otras afecciones neurológicas.
  • Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) pueden mejorar la comunicación entre el personal de enfermería y los pacientes, según un estudio publicado en la revista Journal of Nursing Education and Practice. El uso de tabletas electrónicas, por ejemplo, puede ayudar a los pacientes con dificultades para comunicarse a expresar sus necesidades y preferencias.
  • Según un estudio publicado en la revista Journal of Psychiatric and Mental Health Nursing, la implementación de una intervención de enfermería centrada en la comunicación mejoró la calidad de vida de los pacientes con trastornos mentales graves. La intervención se centró en mejorar la capacidad de los pacientes para comunicar sus necesidades y emociones y en fomentar la empatía y la comprensión por parte del personal de enfermería.

11. Necesidad de practicar sus creencias

La necesidad de practicar las creencias se centra en la capacidad de una persona para explorar, conocer y promover sus principios, valores y creencias personales, manejándolos de manera que den sentido a su vida y a su participación en la sociedad.

Esta dimensión fundamental aborda la importancia de las creencias y valores personales en el bienestar emocional y psicológico de un individuo.

La práctica de estas creencias puede manifestarse a través de actividades religiosas o espirituales, así como otras prácticas culturales o sociales que tengan significado para la persona.

Esta necesidad adquiere relevancia al proporcionar a las personas un sentido de conexión con algo más grande que ellas mismas, permitiéndoles encontrar significado y propósito en sus vidas.

La práctica de las creencias también se asocia con beneficios para la salud mental y física. Investigaciones han revelado que la participación en actividades religiosas o espirituales está vinculada a una mejor salud mental, menor incidencia de ansiedad y depresión, así como a una mayor calidad de vida. Además, las creencias pueden ser una fuente de consuelo y apoyo emocional durante períodos de estrés o dificultad.

Es fundamental reconocer que las creencias y prácticas de cada individuo son únicas y personales, mereciendo respeto y valoración por parte de los profesionales de la salud y de la sociedad en general. La falta de respeto hacia estas creencias puede tener un impacto negativo en el bienestar emocional y psicológico de una persona.

Por tanto, es esencial que los profesionales de la salud trabajen para comprender y respetar las creencias y prácticas de sus pacientes, proporcionando un entorno de apoyo y respeto que permita a las personas practicar sus creencias de manera segura y saludable.

Problemas de no practicar sus creencias

  • Pérdida de identidad personal: La práctica de las creencias es un aspecto fundamental de la identidad personal de un individuo. La falta de práctica puede llevar a la confusión y a la pérdida de sentido de sí mismo.
  • Aislamiento social: La práctica de las creencias suele estar relacionada con la participación en comunidades religiosas o culturales. Si una persona no practica sus creencias, puede perder contacto con estas comunidades y experimentar aislamiento social.
  • Estrés emocional: Las creencias pueden proporcionar a las personas una sensación de propósito y significado en la vida. La falta de práctica puede llevar a una sensación de vacío emocional y estrés.
  • Falta de apoyo en tiempos difíciles: La práctica de las creencias suele proporcionar un sistema de apoyo en momentos de dificultad. Si una persona no practica sus creencias, puede carecer de este apoyo en tiempos de necesidad.
  • Conflicto interno: Si una persona tiene creencias pero no las practica, puede experimentar conflicto interno entre sus valores y acciones. Esto puede llevar a sentimientos de culpa o frustración.

Evaluación del profesional de enfermería

  • Respetar las prácticas y creencias del paciente: la enfermera debe respetar las creencias del paciente y asegurarse de que sean respetadas por otros miembros del equipo de atención médica.
  • Facilitar la práctica de las creencias: la enfermera puede ayudar al paciente a practicar sus creencias al proporcionar un espacio adecuado y recursos necesarios, como materiales religiosos, y permitiendo el acceso a líderes religiosos o espirituales.
  • Proporcionar apoyo emocional: la enfermera puede ayudar al paciente a lidiar con el estrés emocional relacionado con la imposibilidad de practicar sus creencias, brindándole apoyo y escucha activa.
  • Identificar recursos: la enfermera puede identificar recursos comunitarios, como líderes religiosos, grupos de apoyo y organizaciones culturales, que puedan ayudar al paciente a satisfacer sus necesidades de creencias.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según un estudio de la Fundación Lilly, el 70% de los pacientes ingresados en hospitales públicos de España considera importante recibir atención espiritual o religiosa.
  • La escala ESAS (Evaluación Sintomática de Síntomas Espirituales) se utiliza para evaluar la necesidad espiritual y religiosa de los pacientes. Se compone de 12 preguntas que evalúan la presencia, intensidad y grado de perturbación que experimenta el paciente en su dimensión espiritual.
  • Según un estudio de la Universidad de Duke, el apoyo espiritual y religioso puede tener efectos beneficiosos en la salud, como la reducción del estrés y la ansiedad y el aumento de la resiliencia.
  • Un estudio de la Universidad de Harvard encontró que las personas que asisten regularmente a servicios religiosos tienen una vida más larga y saludable que aquellos que no lo hacen.
  • La escala SWBQ (Spiritual Well-Being Questionnaire) se utiliza para evaluar el bienestar espiritual en pacientes con enfermedades crónicas. Se compone de dos subescalas: una enfocada en la dimensión religiosa y otra en la dimensión existencial.

12. Necesidad de trabajar en algo gratificante para la persona

Se centra en la capacidad de una persona para participar e interesarse en actividades creativas y/o de interés social, fortaleciendo así su autoestima, alegría y autorrealización personal. También aborda la posibilidad de desempeñar algún rol en una organización social, comprometiéndose con ello con interés, dedicación y empeño.

Esta necesidad destaca la importancia de encontrar un trabajo o actividad que resulte gratificante y satisfactoria para el individuo.

El trabajo no solo proporciona un ingreso económico, sino que también puede brindar un sentido de propósito y significado a la vida de las personas.

La imposibilidad de realizar una actividad gratificante puede tener un impacto negativo en el bienestar físico y emocional.

La necesidad de trabajar en algo que resulte gratificante se relaciona con la búsqueda de una vocación o empleo significativo y desafiante, que permita a la persona utilizar sus habilidades y talentos de manera efectiva.

Aquellos que encuentran un trabajo gratificante experimentan mayor satisfacción laboral, motivación y menor estrés en el trabajo. Además, este impacto positivo puede extenderse a la vida personal y social, contribuyendo a elevar la autoestima y el sentido de pertenencia a la comunidad.

Es crucial entender que la percepción de lo que resulta gratificante es subjetiva y puede variar de una persona a otra.

Por lo tanto, es fundamental que cada individuo tenga la oportunidad de explorar sus intereses y habilidades, permitiéndole encontrar un trabajo que le resulte gratificante y satisfactorio en función de sus propias necesidades y aspiraciones.

Problemas de no trabajar en algo gratificante

  • Estrés laboral: Trabajar en un empleo que no es gratificante puede generar altos niveles de estrés y ansiedad, lo que puede afectar la salud mental y física de la persona.
  • Desmotivación: Si no se siente satisfecho con su trabajo, la persona puede perder la motivación y la ilusión por cumplir con sus responsabilidades laborales, lo que puede afectar su rendimiento y productividad.
  • Insatisfacción personal: Al no encontrar satisfacción en el trabajo, la persona puede sentir que su vida no tiene un propósito o sentido, lo que puede generar sentimientos de frustración y tristeza.
  • Baja autoestima: Trabajar en un empleo que no es gratificante puede afectar la autoestima y la confianza en sí mismo de la persona, lo que puede afectar su desempeño en otras áreas de su vida.
  • Problemas de salud: El estrés y la desmotivación laboral pueden afectar la salud física de la persona, ya que pueden generar dolores de cabeza, problemas digestivos, fatiga crónica, entre otros síntomas. Además, si la persona no encuentra tiempo para realizar actividades gratificantes fuera del trabajo, puede afectar su salud mental y emocional.

Cuidados enfermeros

  • Realizar una evaluación de las habilidades y preferencias laborales del paciente.
  • Ayudar al paciente a identificar oportunidades de empleo o actividades voluntarias que se adapten a sus intereses y habilidades.
  • Ayudar al paciente a desarrollar habilidades y competencias necesarias para un trabajo o actividad en particular.
  • Ayudar al paciente a establecer metas y objetivos realistas relacionados con el trabajo o actividad elegida.
  • Proporcionar apoyo emocional y práctico durante la búsqueda de empleo o actividad laboral.
  • Ayudar al paciente a adaptarse y ajustarse a la nueva actividad laboral o vocacional, incluyendo apoyo durante la transición y en el lugar de trabajo.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según un estudio de Gallup, solo el 15% de los empleados en todo el mundo están comprometidos con su trabajo y se sienten satisfechos con su trabajo.
  • La satisfacción laboral se ha relacionado con una mejor salud mental, menor estrés y una mejor calidad de vida en general.
  • La Escala de Satisfacción Laboral de Minnesota es una herramienta utilizada para evaluar la satisfacción laboral de un individuo.
  • El Índice de Felicidad en el Trabajo de SHRM es otra herramienta utilizada para medir la satisfacción laboral y el bienestar emocional de los empleados.
  • Según un informe del Instituto de Investigación de la Felicidad, los trabajadores que informan altos niveles de satisfacción laboral tienen una tasa de rotación más baja, son más productivos y tienen menos ausencias por enfermedad.

13. Necesidad de desarrollar actividades lúdicas y recreativas

La necesidad básica 13 se centra en la capacidad de una persona para distraerse, entretenerse y cultivarse.

Implica el interés de la persona en invertir tiempo y energía en actividades que se alejen de sus problemáticas personales, como juegos, lectura, ver películas, entre otros, con el objetivo de obtener satisfacción personal.

Las actividades recreativas abarcan una amplia gama, desde deportes y juegos hasta pasatiempos, lectura, música y viajes.

Estas actividades no solo ofrecen un escape de las tensiones diarias, sino que también desempeñan un papel fundamental en el mantenimiento de un equilibrio emocional y físico saludable.

La necesidad de participar en actividades lúdicas y recreativas es esencial para el bienestar físico y mental de las personas.

La falta de estas actividades puede dar lugar a problemas como el estrés, el aburrimiento, la desmotivación y afectar la salud mental. Además, la ausencia de estas actividades puede contribuir al aumento del aislamiento social, la soledad y la depresión.

Es crucial tener en cuenta que la preferencia por actividades recreativas varía entre individuos y puede ser influenciada por la edad, el género, la cultura, el estado de salud y otros factores.

Por ejemplo, los adultos mayores pueden preferir actividades más relajantes, mientras que los jóvenes pueden buscar opciones más enérgicas.

En general, las actividades lúdicas y recreativas son componentes importantes de la vida diaria y deben ser alentadas y respaldadas por los profesionales de la salud, incluyendo a los enfermeros, para mejorar el bienestar emocional y físico de los pacientes.

Problemas de no desarrollar actividaddes lúdicas

  • Estrés y ansiedad: La falta de tiempo para realizar actividades de ocio puede aumentar los niveles de estrés y ansiedad. No permitirse un tiempo de descanso y diversión puede afectar el bienestar emocional y mental de la persona.
  • Enfermedades físicas: La falta de actividad física y de tiempo de ocio puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades físicas, como obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, entre otras.
  • Aislamiento social: La falta de tiempo para realizar actividades lúdicas y recreativas puede llevar a la persona a un aislamiento social, lo que puede afectar negativamente su salud mental y emocional.
  • Bajo rendimiento laboral: La falta de tiempo para actividades lúdicas y recreativas puede afectar el rendimiento laboral, lo que puede llevar a la persona a sentirse insatisfecha en su trabajo y a tener un desempeño pobre.
  • Falta de creatividad: La falta de tiempo para realizar actividades lúdicas y recreativas puede afectar la capacidad de la persona para pensar de forma creativa y resolver problemas de manera innovadora.
  • Insomnio: La falta de tiempo para realizar actividades de ocio puede afectar el patrón de sueño de la persona, lo que puede llevar a problemas de insomnio y falta de descanso adecuado.
  • Aburrimiento: La falta de tiempo para realizar actividades lúdicas y recreativas puede llevar a la persona a sentirse aburrida y desmotivada, lo que puede afectar negativamente su calidad de vida.

Evaluación de la «Necesidad de desarrollar actividades lúdicas

  • Evaluar los intereses y preferencias del paciente en cuanto a actividades lúdicas y recreativas.
  • Identificar las limitaciones físicas del paciente y adaptar las actividades en consecuencia.
  • Proporcionar opciones de actividades lúdicas y recreativas, como juegos de mesa, lectura, actividades manuales, música, cine, entre otros.
  • Fomentar la participación en actividades grupales, como terapias de arte o grupos de intercambio de experiencias y aficiones.
  • Promover la actividad física según las capacidades y preferencias del paciente, como caminar, hacer yoga o pilates, o acudir a un gimnasio adaptado.
  • Establecer un calendario de actividades, teniendo en cuenta las preferencias y limitaciones del paciente, y ajustarlas según sea necesario.
  • Educar al paciente y a sus familiares sobre la importancia de mantener una actividad lúdica y recreativa regular para mejorar su calidad de vida y prevenir enfermedades relacionadas con la inactividad.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según la Encuesta Nacional de Salud de 2017 en España, el 26,4% de la población mayor de 15 años no realiza ninguna actividad física o deporte en su tiempo libre.
  • Un estudio publicado en la revista BMC Geriatrics en 2017 concluyó que la realización de actividades recreativas en personas mayores disminuye el riesgo de deterioro cognitivo y demencia.
  • La Escala de Depresión Geriátrica es una herramienta utilizada para evaluar la depresión en adultos mayores, y uno de sus ítems se relaciona con la satisfacción en la realización de actividades lúdicas y recreativas.
  • Un estudio publicado en la revista Journal of Advanced Nursing en 2015 concluyó que la implementación de programas de actividades lúdicas y recreativas en residencias de mayores mejoró la calidad de vida de los residentes y disminuyó los síntomas depresivos.
  • Según un estudio publicado en la revista Journal of the American Geriatrics Society en 2018, la realización de actividades físicas y recreativas en personas mayores está relacionada con una disminución del riesgo de mortalidad y de enfermedades crónicas.

14. Necesidad de satisfacer la curiosidad que permite a la persona su desarrollo en aspectos de salud

La necesidad de satisfacer la curiosidad en el desarrollo de aspectos de salud implica la búsqueda activa de información y conocimientos para mejorar la calidad de vida.

Este deseo natural de comprender los procesos corporales y el entorno refleja la inclinación inherente de los seres humanos hacia el aprendizaje y el descubrimiento.

Esta necesidad va más allá de la mera adquisición de información; también abarca la capacidad de adaptarse a cambios y desarrollar resiliencia para superar períodos de dolor emocional y situaciones adversas.

La curiosidad no solo impulsa el deseo de aprender, sino que también fomenta la capacidad de afrontar desafíos y superar obstáculos, contribuyendo así al bienestar emocional y mental.

La posibilidad de transmitir conocimientos también forma parte de esta necesidad, ya que compartir lo aprendido no solo beneficia al individuo, sino que también contribuye al bienestar de la comunidad.

La enseñanza y la transmisión de saberes pueden fortalecer los lazos sociales y crear una red de apoyo mutuo.

Aprender, descubrir y satisfacer la curiosidad se convierten en elementos esenciales para el desarrollo normal de una persona, contribuyendo tanto a la salud física como a la mental.

La adquisición de conocimientos sobre el propio cuerpo y mente permite tomar decisiones informadas sobre la salud, prevenir enfermedades y adoptar un estilo de vida saludable.

En última instancia, satisfacer la curiosidad en el ámbito de la salud se revela como un componente fundamental para promover y mantener una vida saludable y satisfactoria.

Problemas de no satisfacer la curiosidad

  • Falta de conocimiento sobre enfermedades y condiciones de salud:

    • Riesgo de no reconocer síntomas o buscar tratamiento temprano.
    • Posibles complicaciones de salud a largo plazo.
  • Falta de comprensión sobre opciones de tratamiento:

    • Decisions de tratamiento inadecuadas o falta de tratamiento.
    • Necesidad de información completa sobre opciones de tratamiento.
  • Falta de comprensión sobre medidas preventivas:

    • Preguntas sobre vacunación, lavado de manos y distanciamiento social.
    • Falta de medidas preventivas adecuadas sin información completa.
  • Mayor ansiedad y preocupación:

    • Ansiedad y estrés sobre salud y bienestar.
    • Impacto negativo en bienestar emocional y mental.
  • Falta de toma de decisiones informadas:

    • Esencial para decisiones adecuadas sobre la propia salud.
    • Importancia de estar informado sobre la salud personal.
  • Riesgo de estafas y desinformación:

    • Peligro de caer en estafas de salud.
    • Necesidad de buscar información precisa y confiable.

Datos y estadísticas relevantes

  • Según un estudio realizado por la Universidad de California, la curiosidad es un factor clave en la adquisición y retención de información relacionada con la salud.
  • Un estudio publicado en la revista Health Education & Behavior encontró que la falta de curiosidad puede llevar a la falta de participación en actividades de prevención de enfermedades y promoción de la salud.
  • La escala de curiosidad de Kruglanski (KCS) es una herramienta utilizada para medir el nivel de curiosidad de un individuo en un tema específico.
  • La motivación intrínseca, es decir, la motivación basada en intereses personales, es un factor importante para fomentar la curiosidad y la participación en actividades relacionadas con la salud.
Otras taxonomías diagnósticas

Conoce algunas de las taxonomías diagnósticas más destacadas, analizando sus características principales y resaltando cómo enriquecen y amplían la perspectiva de la NANDA al abordar otros aspectos de la atención de enfermería.

Diagnósticos de Enfermería NANDA

En este artículo, veremos cómo los diagnósticos de enfermería NANDA son herramientas vitales para los profesionales de la salud y como ayudan a elaborar los planes adecuados de los pacientes. También los 7 ejes diagnósticos.

Formato PES en Enfermería

El formato PES en enfermería, creado por Marjory Gordon es una estructura que facilita la elaboración de diagnósticos según la NANDA y que ayuda a los profesionales sanitarios a comprender y abordar problemas de salud.

Tipos de Diagnósticos de Enfermería

En este artículo, veremos los Tipos de Diagnósticos de Enfermería, revelando cómo estos nos ayudan a comprender mejor las necesidades de los pacientes y mejorar la atención de manera práctica y sencilla.

Dominios y Clases NANDA

Descubre cómo se entrelazan con los Diagnósticos de Enfermería de la NANDA con los Dominios y Clases. En este artículo, veremos la relación vital entre estos elementos, proporcionando una visión clara y esencial para la práctica clínica.

Diagnósticos asociados a Patrones Funcionales

Descubre cómo la metodología de Marjory Gordon en enfermería facilita diagnósticos precisos asociados a Patrones Funcionales de Salud. Una guía esencial para una atención más personalizada y efectiva.

Entrevista por Patrones Funcionales

En este artículo, veremos la esencia de la entrevista por Patrones Funcionales en enfermería, que nos muestra cómo esta técnica es clave para proporcionar un cuidado integral y personalizado a cada paciente.

Valoración de Patrones Funcionales

Descubre como la valoración de enfermería por patrones funcionales aporta un enfoque integral, transformando la atención de pacientes. Detallaremos la valoración de cada uno de los 11 patrones para una comprensión completa de su salud.

Marjory Gordon

Explora la influencia de Marjory Gordon en la enfermería moderna, descubriendo su teoría de los 11 Patrones Funcionales de Salud y cómo ha dejado una huella importante en la práctica actual.

Diagnósticos NANDA asociados a Necesidades básicas Humanas

Descubre cómo la integración de los diagnósticos de la NANDA potencia la aplicación práctica de las 14 necesidades básicas de Virginia Henderson, brindando una perspectiva única y más efectiva en el cuidado enfermero.

¡Mantente actualizado!

Regístrate para recibir nuestro boletín de forma gratuita y mantente informado sobre los últimos eventos, cursos y novedades en el mundo de la enfermería

Gracias por suscribirte al boletín. ¡Te mantendremos al día de todas nuestras actividades!